El primer ministro de Francia, Jean Castex, anunció este jueves el cierre de cuatro semanas en 16 regiones del país debido al aumento de casos de COVID-19.
La medida que entrará en vigor a partir del viernes será menos estricto que en los cierres nacionales anteriores, pero la escuelas permanecerán abiertas.
Sumado a estas medidas, Castex también declaró que el toque de queda a nivel nacional se retrasará una hora para comenzar a las 19:00 (hora local).
Asimismo, las tiendas de artículos esenciales, incluidas las librerías, permanecerán abiertas y se permitirán actividades al aire libre en un radio de 10 kilómetros, pero no se permitirán los viajes interregionales.
Francia contabiliza hasta ka fecha 4 millones 241 mil 959 de casos confirmados y 91 mil 833 muertes a casua de la enfermedad.